Los talleres mecánicos generaron el 41% del aceite usado en Baleares (1.265 toneladas), de forma que su actividad se convirtió en 2016 en la principal productora de este residuo. Esto se debe a que este sector destaca por ser el que mayor cantidad de aceites lubricantes consume, el 57% de la cantidad total comercializada.
Adalmo, Gestor de residuos autorizado con NIMA 0700000002 y adherido a SIGAUS, se ocupa de la recogida del aceite usado en Baleares. En total se han atendido más de 900 talleres recogiéndose 3.082 toneladas de aceite usado.
Estos aceites pueden contener sustancias o compuestos tóxicos de cloro, fósforo, azufre, cinc, metales pesados (plomo, cadmio…), etc. así como compuestos aromáticos, todos ellos altamente contaminantes, convirtiéndose en un residuo peligroso que requiere un adecuado tratamiento. Si no son gestionados correctamente dañarían gravemente el medio ambiente y además suponen un riesgo para la salud.
Mediante la entrega de este residuo a Adalmo, los productores de aceites industriales cumplen la obligación de garantizar la correcta gestión de los aceites usados y, con ello, reducir su impacto ambiental.
Adalmo garantiza su adecuado tratamiento para convertir el residuo de nuevo en materia prima y evitar refinar más petróleo. El aceite usado recogido en Baleares el año pasado fue valorizado en su totalidad, el 95,5% se regeneró permitiendo devolver al mercado 1.291 toneladas de lubricantes equiparables al 25% del consumo en la Comunidad. Además, este tratamiento hizo posible evitar la emisión a la atmósfera de 5.815 toneladas de dióxido de carbono (CO2). El 4,5% restante, no apto para ser regenerado, se trató para valorización energética, produciéndose en Baleares una energía equivalente a 1 GWh, suficiente para abastecer el consumo anual de 234 hogares en las Islas.