Según se detalla en el Informe de Transiciones 2024, Baleares continúa con una tendencia al alza en la generación de residuos. Esto refleja que aún no se ha logrado el desacoplamiento real entre la producción de residuos y el crecimiento económico en Mallorca, estrategia clave para prevenir la generación de residuos según la política europea. Los datos sobre recogida selectiva tampoco muestran avances significativos, manteniéndose estancados en niveles bajos. En cuanto a la reutilización y la preparación para la reutilización, se observa una evolución positiva y en crecimiento, aunque con un amplio margen de mejora. Precisamente, la reutilización es uno de los sectores con mayor potencial para avanzar hacia una economía circular y vinculada al territorio.
Rezero, mediante la firma del convenio con Adalmo, sigue ampliando su red de alianzas para avanzar hacia una Sociedad Residuo Cero. Este modelo busca transformar la visión lineal, donde los recursos se convierten en residuos, hacia un sistema basado en una gestión eficiente y limpia de los recursos.
Adalmo es una empresa mallorquina con más de 50 años de historia, que comenzó recuperando el valor de los metales y hoy en día ofrece nuevas vidas a múltiples materiales, como electrodomésticos, maderas, papeles, cartones, plásticos, neumáticos o textiles. También gestiona fracciones de residuos sanitarios y peligrosos, siendo el mayor gestor privado de residuos de Baleares en la actualidad. Es un actor estratégico para impulsar la transformación del modelo lineal de producción y consumo.
Como figura clave al final de la cadena de producción y consumo, Adalmo puede aportar información y una visión estratégica sobre la gestión de recursos una vez convertidos en residuos. Además, puede facilitar el desarrollo de estrategias e iniciativas que promuevan la reutilización. Por su parte, Rezero, con su visión transformadora y transversal, puede generar iniciativas y proyectos que cierren el ciclo. Esto incluye desde el ecodiseño de productos y la prevención de la toxicidad, hasta el desarrollo de estrategias y ecosistemas de reparación y reutilización de productos, garantizando que el reciclaje o el compostaje sean procesos limpios, eficientes y libres de tóxicos.
El convenio firmado entre ambas entidades tendrá una vigencia de dos años y permitirá a Rezero continuar con su labor de incidencia, así como explorar posibles sinergias en proyectos enfocados a la reutilización de envases o textiles.